Es que no lo volvere a ver.
Y tengo miedo a equivocarme, a sufrir ser lastimada, equivocarme es algo malo pero amarte es un pecado.
Y ruego a dios que esto termine, para poder ser la de antes, que no llora por hombres y tiene siempre un amante.
Y me resulta imposible sacarlo de mi cabeza, un camino de ida y vuelta que termina en la cerveza.